Blogia
profedesociales

Historia de 4º de ESO

La monarquía absoluta (6). La monarquía hispánica. El conde-duque de Olivares

La monarquía absoluta (6). La monarquía hispánica. El conde-duque de Olivares

Y en el nombre de Filipo Cuarto,

que por siglos reine,

con más vitorias que nunca,

tan dichoso como siempre,

tomo aquesta posesión. 

Dulces instrumentos suenen. 

Ya el sargento en la muralla

las armas de España tiende. 

Oíd, soldados, oíd. 

¡Bredá por el rey de España!

¡Y plegue al cielo que llegue

a serlo el mundo rendido

desde levante a poniente!

Calderón de la Barca. El sitio de Breda (fragmento)

Gaspar de Guzmán y Pimentel. Conde-duque de Olivares (1587-1645)

De todos los validos españoles del siglo XVII el que tuvo mayor altura política fue el conde-duque de Olivares. Su politica tuvo luces y sombras, pero fue con diferencia el mejor político de ese siglo. En él se conjugaron la ambición y el talento, autoritarismo y pragmatismo.

En 1624 presentó al rey ell Gran Memorial en el que se propone la uniformidad legal en los distintos reinos, medidas para reforzar el poder real con el fín de obtener un mejor aprovechamiento de los recursos y poder sufragar los gastos de la política exterior y así poder sufragar los gastos del imperio a todos los  reinos que lo componían y mantener los reinos del Imperio. Para ello renunció a una política ofensiva y se limitó a mantener el "status quo", sin embargo, a pesar de algunas sonadas victorias especialmente la de Breda  en 1625 (inmortalizada por Velázquez) o la impresionante victoria de Nordlingen sobre la coalición protestante de holandeses y suecos en 1635, la trayectoria militar de España bajo el conde-duque fue de mal en peor y se sucedieron las derrotas y desastres militares. Una de las causas fue la falta de recursos económicos. A pesar de las riquezas americanas, los gastos de la política exterior de la monarquía eran tan altos que en ocasiones no se pudo hacer frente a las pagas de los soldados y esto produjo amotinamientos. Ciertamente la pobreza de la monarquía del Imperio más grande del planeta era proverbial y se admite que en ocasiones no habia mas que unos cuantos huevos por toda comida en la corte. Las guerras provocaron una creciente deuda que llevó a la bancarrota a la corona en 1627, 1647, 1657,   1662.

 

La agresiva política exterior de Olivares en Europa pretendía mantener la hegemonía española en el continente, y para ello no se escatimaron recursos contra los dos conflictos principales (las Provincias Unidas y Francia): Tregua de los Doce Años con las Provincias Unidas (1621), rendición de Breda (1624-1625), Guerra de los Treinta Años (en apoyo de los Habsburgo austríacos), Guerra de Sucesión de Mantua (1629-1631), conflictos bélicos con Inglaterra y Francia,.

El conde-duque tenía una solución. Castilla soportaba el mayor coste de los gastos de la política europea, también en hombres. Otras regiones y reinos del Imperio tenían una mayor capacidad económica auspiciada por una floreciente burguesía emprendedora y comerciante. Demograficamente no presentaban el desgaste de Castilla. La solución era la cooperación fiscal y humana de otros reinos para hacer frente a los gastos de la guerra. Entre 1627-1635 un último intento de imponer sus reformas por la vía autoritaria. La política unificadora seguía siendo, a los ojos del conde-duque, la única posibilidad de salvación para la monarquía, pues era preciso que los demás reinos contribuyesen a las cargas militares. Pero estos territorios, que llevaban años sin aportar a los gastos de la corona mas que las peticiones reales atendidas por sus cortes, se opusieron a sufragar con dinero y hombres la política imperial de la monarquía hispánica. Esto supuso un punto de inflexión en la carrera política del conde-duque. En 1640 se va a sublevar Cataluña. También Portugal.  Un año antes se produce la derrota de la batalla naval de la Dunas y se perdía la Vlatelina

 

 

La monarquía absoluta (3). La monarquía hispánica. Política exterior de Carlos II

La monarquía absoluta (3). La monarquía hispánica. Política exterior de Carlos II

Carlos II (1665-1700) hereda el trono con sólo 4 años. Será su madre Mariana de Austria la que ejerza la regencia apoyada en el padre Nithard, su valido.

La primera cuestión a la que tuvo que hacer frente la regente fue la llamada Guerra de Devolución contra Francia, producida por la reclamación de Luis XIV a España de la dote pactada en la Paz de los Pirineos por su boda con María Teresa de Austria, hija de Felipe IV de España. Francia aprovecha un momento de gran inestabilidad en el interior de la monarquía a raíz del enfrentamiento de Juan José de Austria hermanastro del rey con el padre Nithard, valido de la reina. En 1668 se firma el Tratado de Aquisgran, por el que España renunciaba a Portugal y su imperio y recuperaba el Franco Condado y entregaba a Francia numerosas plazas francesas y flamencas.

Ese mismo año España reconocía la independencia de Portugal mediante la Paz de Lisboa.

Un nuevo enfrentamiento con Francia, llevó a las dos naciones a firmar en 1684 en Ratisbona una tregua de veinte años.

Seis años después, en 1690, se rompe de nuevo a llevarse a cabo una alianza entre España, Inglaterra, los Países Bajos y el Imperio para frenar el poder creciente de Francia en la zona del Rin. Esto provocaría un nuevo enfrentamiento militar, la guerra de los nueve años o de la gran alianza , que duraría hasta 1697. En esta guerra los ejércitos franceses ocuparon varias plazas catalanas, entre ellas Barcelona en 1697. El conflicto se extendió incluso a los territorios americanos. La guerra finalizó con la paz de Ryswick (o Rijswijk), por la que Luis XIV se vio obligado a ceder a España plazas en Cataluña. Flandes y Luxemburgo.

A estas alturas, con un rey enfermizo y sin descendencia, las potencias europeas empezaban a mover sus fichas para hacersse un hueco en la sucesión del trono de España. Se preparaba, lenta pero inexorablemente, la guerra de Sucesión española. Tras la muerte en 1699 de José Fernando Maximiliano el elegido para la sucesión, se produjo la disputa entre elegir a Carlos, hijo del emperador de Austria y biznieto de Felipe III o Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV y biznieto de Felipe IV. La corte se dividió en dos bandos, pero Carlos II se decidió por Felipe al que dejó nombrado en su testamento un mes antes de morir, el 1 de noviembre de 1700.

 

La monarquía absoluta (4). La monarquía hispánica. Política exterior de Felipe IV

La monarquía absoluta (4). La monarquía hispánica. Política exterior de Felipe IV

Felipe IV (1621-1665)

El mismo año que se encargaba del gobierno del Imperio, el rey Felipe IV con sólo 16 años, tendría que hacer frente a la mayor crisis bélica que se produjo en el siglo XVII en Europa: La guerra de los 30 años , en la que su padre, Felipe III, había entrado al prestar ayuda a su tío, el emperador Fernando II de Austria, en su enfrentamiento con los protestantes bohemios.

En 1621 termina la tregua de los 12 años con los holandeses y de nuevo empiezan los enfrentamientos militares.

Los intereses de Francia por reducir el poder de los Habsburgo en Europa llevaron al cardenal Richelieu, favorito del rey Luis XIII, a aliarse con Holanda y Suecia en contra de España en 1636. En represalia los ejercitos españoles atacaron las regiones francesas de Champagne y Borgogne, y amenazaron al mismísimo París. Finalmente fueron derrotados en Copiegne y después de ésta, los resultados no estuvieron claros entre los dos bandos.

En 1640 Cataluña se sublevaba contra Felipe IV y en 1641 Luis XIII fue proclamado conde de Barcelona, dividiéndose Cataluña en los partidarios de pertenecer a Francia o a España.

Ese mismo año se independiza Portugal que sumirá en una guerra a los dos países hasta 1668.  

En 1643 las tropas de Felipe IV, que debían hacer frente a la insurrección de Cataluña, fueron dramáticamente derrotados en Rocroi , marcando esta batalla el fin de los poderosos tercios españoles.

La guerra de los treinta años terminó en 1648 con la paz de Westfalia , pero el enfrentamiento de España con Francia se prolongó varios años más.

Francia, representada por el cardenal Mazarino, se alía con Inglaterra en 1653, lo que supone el ataque de los ejercitos ingleses las plazas españolas en América, Santo Domingo y Jamaica, pasando esta última a manos inglesas.

En 1654 Inglaterra declara oficialmente la guerra a España y a partir de este momento se intensifican los ataques corsarios a los barcos de las flotas españolas que venían de América.

En 1658 un nuevo pacto entre Inglaterra y Francia permite crear un ejercito que ataca a posesiones españolas en Europa y que, tras la derrota del ejercito español en la batalla de las Dunas , permitió que las plazas de Dunquerque, Flandes marítimo, parte de Bravante y otras se perdieran definitivamente. Esta derrota precipitó las conversaciones entre España y Francia hasta la firma en 1659 de la Paz de Los Pirineos , por la que se reconoce que los territorios españoles al norte de los Pirineos, como el Rosellón y la Cerdaña , así como el Artois y algunas plazas en Flandes, son para la corona francesa y se establece la actual frontera entre ambos estados.

Conexión de los moriscos con los berberíscos y turcos

Conexión de los moriscos con los berberíscos y turcos

El contenido de este post es un artículo de Emilio Sola que me he permitido retocar ligeramente (espero no haber cambiado el sentido del mismo) a fin de hacerlo más asequible al alumnado de secundaria.

Los interesados puede ver el artículo completo en la web de Archivo de la Frontera, pulsando en los diferentes links. Todo el contenido de la web es muy interesante, también para los estudiosos de la literatura clásica española, especialmente con la relación con Miguel de Cervantes y Saavedra.

Archivo de la frontera

CORSARIOS O REYES. De la saga de los Barbarroja a Miguel de Cervantes.

Emilio Sola. Alcalá, 1998.

(RESUMEN LIGERAMENTE ADAPTADO por CMFdeL para este blog)

Moriscos valencianos/corso berberisco y la actividad inquisitorial en tiempos del hermano de Jorge Manrique, el gran inquisidor Alfonso Manrique, como fuente para la elaboración de martirologios islámicos, tan populares en Barbería como las historias de cautivos en Castilla.

(1533) "Jueves, a 12 de junio, estando su majestad en Valencia, se hizo un auto, en el cual fueron quemados 300 hombres y mujeres y 14 estatuas de muertos, y fueron reconciliados 32. Algunos de ellos eran tan ricos que valió su confiscación 80.000 ducados. Y fue muy importunado el emperador de todos los del reino de Valencia para que hiciese guerra al tirano Barbarroja, que residía en la villa de Argel, puerto de mar que era en Africa, porque les quitaba el comercio de Mallorca y la navegación de Italia, y el trigo que les traían de Sicilia, y les llevaba los moradores del reino. "Y permitió Dios, para que su majestad mejor lo creyese y remediase como le rogaban, que aconteciese en aquel tiempo que saltasen en tierra los moros de seis fustas y fuesen a cercar el castillo de Veydor, el cual luego tomaron, robando todo lo que en su majestad, proveyó que hubiese siempre en el reino dos guarniciones, la una que guardase en la Plana y la otra en las villas de Oliva y Gandía".

Este texto puede servir de introducción para abordar la conexión entre los moriscos españoles, sobre todo levantinos, y Berbería. En concreto, la abundante población morisca valenciana, aproximadamente un tercio de la población de aquel reino. Si los españoles de la época podían encontrar en la violencia berberisca una justificación para muchas cosas, los berberiscos consideraban el trato dado por las autoridades civiles y eclesiásticas a sus correligionarios españoles una justificación a su propia violencia contra España y sus gentes cristianas.

La respuesta contestataria (de los moriscos valencianos ante la política oficial) osciló de la emigración a la revuelta. La evasión geográfica, constante ya años atrás, se radicalizó en esta coyuntura. De las revueltas que surgieron por entonces en Valencia la más amplia fue la de la sierra de Espadán, que obligó a un importante esfuerzo bélico, de marzo a agosto de 1526, para su represión.

El Santo Oficio no menguó en su actividad contra los nuevamente convertidos y de 1528 a 1530 fueron citados ante la Inquisición de Valencia ciento seis casos de herejía, de los que la gran parte eran moriscos. De 1532 a 1540 el número de personas juzgadas por herejía llegó a cuatrocientos cuarenta y uno y en su mayoría se trataba de moriscos.

La aceleración del tratamiento del problema morisco hay que insertarla en el contexto de la agobiante incidencia de la piratería que en los años treinta no haría más que agudizarse. El 11 de enero de 1530 se publica en Valencia un bando real por el que se impone pena de muerte a los moriscos valencianos que, sin permiso, mudasen de domicilio o penetrasen en los lugares o términos de Polop, Callosa, Finestrat, Bolulla, Orxata, Sella y Relleu, con el fin de evitar contactos con los piratas. En 1535 Barbarroja merodeaba por las costas de Oropesa y Villajoyosa haciendo numerosos cautivos cristianos. La relación entre moriscos y piratas es indiscutible. Danvila aporta pruebas irrefutables a través del análisis de los procesos inquisitoriales incoados contra Joan Salvatierra y Alfonso Cantalapiedra, moriscos agentes y espías de Barbarroja. Las Cortes de 1537 se hicieron eco de esta problemática estableciendo las penas de galeras como penitencia habitual en los procesos de la Inquisición.

La gran ofensiva contra los moriscos se va a producir desde 1540. La pragmática real de 1541 prohibiendo tal conexión de moriscos con turcos, así como la libre acogida de los moros granadinos, `alarbes' o `tagarinos' en Valencia y el uso de armas ofensivas o defensivas, tiene su inmediata plasmación en la fracasada expedición a Argel. La Inquisición respondió a esta presión coyuntural a través de las directrices represivas del nuevo inquisidor general Pardo de Tavera. En la actuación inquisitorial contra los musulmanes españoles --valencianos en este caso-- estaba una de las claves de aquella envenenada relación de las autoridades argelinas con los cautivos cristianos españoles; en ella veían una justificación primera para las más caprichosas manifestaciones de crueldad, que las justificaban por dicha actuación.

Los moriscos constituyeron en Valencia la víctima más frecuente de la agresividad inquisitorial en los años que nos ocupan (1530-1609), como lo fueron los judíos en el periodo 1480-1530. La contra-cultura judeo-morisca mereció la atención del Santo Oficio, que desde sus orígenes hasta la expulsión de los moriscos procesó a un total de 5.500 judíos y moriscos (un 56,5% de ellos serían moriscos y un 43,5% judíos), cifra que representaría más de las tres cuartas partes del total de procesados desde los comienzos de la Inquisición hasta 1609. Del total de 125 relajados (relajados al brazo secular, lo que significa condena a muerte) de 1566 a 1609, 96 fueron moriscos. La pena de relajación se impuso, entre los moriscos, a los renegados que tenían trato con Argel, a los alfaquíes retajadores o a los inductores a prácticas musulmanas. Se gravaba especialmente la conspiración política o el magisterio doctrinal. Aunque las confiscaciones de bienes moriscos fueron suprimidas jurídicamente desde las Cortes de 1528, en la práctica siguieron aplicándose hasta la concordia de 1571 y después, de 1587 en adelante.

Las penas eran aplicadas por la Gobernación, la Audiencia o la Inquisición. La pena capital más dura era la que imponía la Gobernación, puesto que llevaba implícitos el corte de manos, el colgamiento y la posterior descuartización. La Audiencia, como la Inquisición, se solía limitar a la quema en el poste. La aplicación de la tortura fue, desde luego, siempre menor en los tribunales ordinarios que por parte de la Inquisición, que alcanzó un 30%" Las penas más frecuentes en los tribunales (azotes y galeras) fueron similares a las aplicadas por la Inquisición valenciana. El número de azotes más abundantemente registrado es el de cien.

Es muy probable que la numerosa población de origen valenciano en Berbería tuviera, en su mayoría, alguna historia que contar de confiscaciones de bienes, torturas o muerte en la hoguera por cuestiones religiosas; tuvieran, por lo tanto, sus "suhada" o mártires. Y es muy posible que sus narraciones orales incluyeran toda una casuística terrible, similar sin duda a la narrada por Antonio de Sosa para los medios cristianos piadosos, por ejemplo, y que con el transcurso del tiempo se iría adornando con los mil y un horrores sensibilizando precisamente a las personas más jóvenes y más piadosas.

La monarquía absoluta (3). La monarquía hispánica. Política exterior de Felipe III-

La monarquía absoluta (3). La monarquía hispánica. Política exterior de Felipe III-

La política exterior española va a cambiar considerablemente en el siglo XVII. De una actitud ofensiva va a pasar a una actitud defensiva y a la finalización de la hegemonía militar en Europa.

Felipe III (1598-1621).

Durante el reinado de Felipe III se produjeron enfrentamientos exteriores pero la orientación de la política real fue la de la pacificación. Continuó la hostilidad con los turcos otomanos y el enfrentamiento con el ducado de Saboya y la república de Venecia, pero se firmaron varias paces y treguas.

Las relaciones con Inglaterra estaban en crisis desde Felipe II. En 1599 una flota inglesa en la que participaba el corsario Drake, había atacado A Coruña, donde destacó la acción heroíca de María Pita , y las islas Canarias, y, aunque una flota española había salido a su encuentro, ésta sufrió una gran derrota. Dos años después en 1601, el duque de Lerma había planeado enviar una nueva flota a invadir Inglaterra, pero ésta fue de nuevo derrotada.

En 1603 murió la reina de Inglaterra, Isabel I y, con la subida al trono de Jacobo I Estuardo, se establecieron contactos para un tratado de paz que se logró a pesar de las actuaciones en contra de la monarquía francesa, el 28 de agosto de 1604 (Tratado de Londres).

Las Provincias Unidas (Provincias rebeldes de los Países Bajos) llevaban varios años enfrentadas a la monarquía española con el fin de conseguir su independencia. El 9 de abril de 1609 se firmó la tregua de los 12 años , por la que se aceptaba de hecho la independencia de Holanda. La cuestión económica y el prestigio militar se antepusieron a la cuestión religiosa.

Para Holanda esto supuso el reconocimiento de su capacidad de comerciar en Europa (se levanta el embargo que tenía el país), su capacidad de comerciar con América, y no comprometerse a garantizar la libertad religiosa de los católicos en sus territorios. Esto significó para los holandeses el comienzo de su época dorada del comercio, abriendo puertos comerciales en todo el mundo y estableciendo una importante colonia en el Brasil (Guyana holandesa actual Surinan ).

España se benefició a corto plazo de una tregua que le permitía recuperarse de los gastos de la guerra y gracias a ella se dirigieron los esfuerzos políticos a llevar a cabo la planeada expulsión de los moriscos.

En 1615 se ratifica la paz con Francia por la que se establece una alianza matrimonial por la que la hija del rey de Francia, Isabel de Borbón se casaría con el futuro rey de España Felipe IV y la infanta Ana se casaría con el futuro rey de Francia, Luis XIII.

Este periodo pacífico se va a conoce con el término PAX HISPANICA .

Pero desde 1620 cambia radicalmente el panorama español. Ha comenzado La guerra de los treinta años (1618-1648) con los enfrentamientos entre los bohemios protestantes y el católico emperador Fernando II (Hermano de Felipe II de España). Bohemia no reconoce  Fernando II y eligen como rey al elector del palatinado Federico V, calvinista y jefe de la Unión Evangélica Protestante. La guerra será un enfrentamiento entre católicos y protestantes. La debilidad del emperador le hacía imposible imponerse a los protestantes por lo que recurrió a su sobrino Felipe III de España, quien le envió tropas que le permitieron la victoria.

En 1621 terminó la tregua con los holandeses y de nuevo empezaron las escaramuzas militares. Desgraciadamente para el rey español ese mismo año una erisipela le segó la vida cuando tenía 43 años.

La monarquía absoluta (2). La monarquía hispánica del siglo XVII. Los validos.

La  monarquía absoluta (2). La monarquía hispánica del siglo XVII. Los validos.

El panorama politico español cambia radicalmente durante el siglo XVII, respecto al siglo anterior. La monarquía hispánica entra en un declive politico progresivo que culminará con la muerte del último rey Austria, Carlos II. Las razones de este declive hay que buscarlas en la complejidad de mantener un imperio tan extenso, donde los problemas políticos y económicos se suceden, así como las aspiraciones separatistas de muchos de sus territorios; en la debilidad personal de los monarcas y en la política ambiciosa de los validos.

Los tres monarcas españoles que van a reinar en el siglo XVII son Felipe III (1698-1621), Felipe IV (1621-1665) y Carlos II (1665-1700). Los tres pertenecen a la casa de Austria, y debido a tener menor importancia política que sus antecesores, se les suele denominar "Austrias menores" .

El sístema político que ejercieron fue el de la monarquía absoluta. Pero como fueron reyes débiles y alejados de la ajetreada vida política, dejaron el gobierno del imperio en manos de personas de confianza llamadas validos . Los más importantes fueron el duque de Lerma , valido de Felipe III, el condeduque de Olivares , valido de Felipe IV.

Carlos II sólo tenía 4 años cuando heredó la corona, por lo que su madre, Mariana de Austria (1665 a 1675), ejerció la regencia durante 10 años. Ella también tuvo sus validos, de los que destaca el jesuíta autriaco J.E. Nithard.

Después de intrigas palaciegas, el hermano bastardo del rey, D. Juan José de Austria , consiguió en 1669 expulsar a Nithard y en 1677, tras asaltar Madrid, fue nombrado valido de su hermanastro, alejando de la corte a la reina madre y a su valido Fernando de Valenzuela. Pero su prematura muerte en 1679 dejó paso a otros validos, destacando entre todos ellos el conde de Oropesa.

 

La monarquía absoluta (1): Los teóricos.

La monarquía absoluta  (1): Los teóricos.

Los teóricos de la monarquía absoluta se apoyában básicamente en la idea que era una "monarquía de Derecho Divino”. Esto quiere decir que el poder del rey venía directamente de Dios y que debía ejercerlo sobre todo el pueblo sin que nadie pudiera oponérsele. El poder político no lo entrega Dios a su máximo representante en la tierra, el Papa, sino al rey.

Durante los siglos XV, XVI y XVII aparecieron teóricos que justificaban el poder del rey, también denominado "príncipe", palabra que engloba a todos los gobernantes aunque no fueran reyes, como los de las repúblicas italianas.

Entre estos teóricos destaca el italiano Maquiavelo(1469-1527)que en su libro "El Principe" escribió sobre como debería ejercer el príncipe el poder para conseguir ser un buen gobernante.

El principal pensador sobre la monarquía absoluta en el siglo XVI va a ser:

Jean Bodin (1530-1596) que definió por primera vez en la historia a la soberanía como el "poder absoluto y perpetuo de la República", el cual no recaía sobre una persona o familia sino sobre el Estado. La soberanía es el poder absoluto, está por encima de las leyes y es irresponsable.

 

Bodin o Bodino, escribió:

“La soberanía es el poder absoluto y perpetuo de la República (...). La soberanía no es limitada, ni en poder, ni en responsabilidad, ni en tiempo (...). es necesario que quienes son soberanos no estén de ningún modo sometidos al imperio de otro y puedan dar ley a los súbditos y anular o enmendar las leyes inútiles (...). Dado que, después de Dios, nada hay mayor sobre la tierra que los príncipes soberanos, instituidos per Él como sus lugartenientes para mandar a los demás hombres, es preciso prestar atención a su condición para, así, respetar y reverenciar su majestad con la sumisión debida, y pensar y hablar de ellos dignamente, ya que quien menosprecia a su príncipe soberano menosprecia a Dios, del cual es su imagen sobre la tierra.”

Jean Bodin. Los seis libros de la República. 1576.

En el siglo XVII, el mayor filósofo que escribió sobre el poder absoluto del gobernante fue

Thomas Hobbes (1588-1679) Este pensador defendió el poder de los reyes pero lo desvinculó de sus orígenes divinos. La defensa de la monarquía absoluta queda recogida en su conocida obra Leviathan .

En Leviathan se recoge que la busqueda de la felicidad personal es lo que mueve al hombre en sus acciones, pero ello lleva al enfrentamiento con otros hombres por lo que se produce violencia, esto queda reflejado en sus dos famosas frases: “Bellum omnium contra omnes” (“Guerra de todos contra todos”) y “Homo homini lupus” (“El hombre es un lobo para el hombre”). Pero, como lo que más anhela el hombre es la PAZ, la solución viene de la mano de un pacto de la sociedad, por el que ésta deposite todo el poder sobre el gobernante, que lo ejercerá de forma absoluta en beneficio de toda la sociedad.

Este gobernante puede ser una persona sola (monarquía) o una asamblea (democracia) o una minoría selecta (aristocracia), pero Hobbes considera que la más perfecta es la monarquía, y la soberanía del rey no residía en el derecho divino, sino en el mantenimiento del contrato social que le había dado tal soberanía.

Respecto a la Iglesia (poder espiritual) y sus relaciones con el poder temporal, Hobbes defendía la total sumisión de la Iglesia al gobernante.

Hobbes escribió:

"La naturaleza ha hecho a los hombres tan iguales en sus facultades corporales y mentales, que todos pueden pretender los mismos beneficios para sí. De esta igualdad de capacidades surge la igualdad en la esperanza de alcanzar nuestros fines; si dos hombres desean una cosa que no pueden gozar ambos, devienen enemigos, y en su camino hacia su fin (...) se esfuerzan mutuamente en destruirse o subyugarse. No hay para el hombre más forma razonable de guardarse de esta inseguridad mutua que la anticipación, y esto es, dominar por fuerza o astucia a tantos hombres como pueda. Es por ello manifiesto que durante el tiempo en que los hombres viven sin un poder común que les obligue a todos al respeto, están en aquella condición que se llama guerra, una guerra de todo hombre contra todo hombre."

Thomas Hobbes. Leviatham (Parte Primera, capítulo XIII)

También del siglo XVII, aunque más tardío, destaca:

Jacques Benigne Bossuet (1627-1704) Este clérigo y pensador francés es quizás el que más cerca está de la idea de monarquía absoluta imperante en Francia en el siglo XVII, representado por Luis XIV "El rey sol". Su principal obra "Política según las Sagradas Escrituras" recoge la idea de que el poder es trasmitido directamente por Dios al Rey, por lo que éste es sólo responsable ante la divinidad y no ante sus súbditos. Sin embargo su idea de absolutismo es diferente a la de Hobbes ya que piensa que el soberano debe estar embebido del espíritu cristiano de justicia y rectitud. Será el temor de Dios el único freno a la actuación de los soberanos.

Bossuet escribió:

"Dios estableció a los reyes como sus ministros y reina a través de ellos sobre los pueblos (...)

Los príncipes actúan como los ministros de Dios y sus lugartenientes en la tierra. Por medio de ellos Dios ejercita su imperio. Por ello el trono real no es el trono de un hombre sino el de Dios mismo.

Se desprende de todo ello que la persona del rey es sagrada y que atentar contra ella es un sacrilegio.”

Bossuet. La política según las Sagradas Escrituras. Libro III.

 

La expulsión de los moriscos bajo el reinado de Felipe III

La expulsión de los moriscos bajo el reinado de Felipe III

Tras la conquista de Granada en 1492, desapareció el último territorio bajo el poder musulmán. Sus habitantes, especialmente de las áreas rurales, siguieron viviendo con sus costumbres y religión, pero a partir de 1502 fueron obligados a convertirse a la religión cristiana. Esto provocó que muchas de las conversiones se realizarna sin convicción y que estos nuevos cristianos mantuvieran sus costumbres y rituales islámicos en privado. A esto musulmanes convertidos se les denominó moriscos.

Los moriscos no terminaron de integrarse en la sociedad hispanocristiana y ello supuso una serie de problemas que en ocasiones terminaron en sublevaciones. En el ámbito religioso fueron observados de cerca por la Inquisición. Tanto a nivel político como religioso sufrieron persecuciones, torturas y condenas a muerte. A nivel social estaban poco valorados y despertaban recelos entre sus vecinos cristianos. A todo ello, aún contribuyó a empeorar su situación las frecuentes incursiones de piratas berberiscos del norte de África que asolaban poblaciones costeras del Mediterráneo y de las que se consideró que eran cómplices. La invasión europea de los turcos y su dominio del mar hacía temer una nueva invasión de la península ibérica por este imperio musulmán y a que los moriscos les facilitaran información y ayuda para ello. La batalla de Lepanto mermó el poder turco pero no eliminó en su totalidad el peligro de las razzias costeras de los piratas.

Todas estas circunstancias unidas al ideal de pureza religiosa de la monarquía hispánica, llevó al rey Felipe III a decretar en 1609 su expulsión. Ésta no se produjo de forma inmediata. El proceso se llevó a lo largo de 5 años y afectó de forma diversa a los territorios hispanos.

 

Esto es lo que vamos a investigar y con los resultados realizaremos un documento en Word-Write, o Powerpoint-Impress.

Las siguientes preguntas pueden servíos de orientación.

¿Quiénes eran los moriscos?

¿En que zonas de la península vivían?

¿A qué se dedicaban?

¿Qué problemas presentaba su integración?

¿Cuándo fueron expulsados?

¿En que número se vieron afectados los diferentes reinos españoles?

¿Cómo fueron deportados y desde dónde partieron?

¿Cómo afectó esto a los territorios donde vivían?

¿Cómo afecto a la economía de la época?

Para resolverlas deberás utilizar varios buscadores y no sólo Google, por ejemplo, Yahoo, Exalead, Live search, Wikipedia, etc.

 

Al finalizar el proceso deberás contestar estas dos preguntas.

¿Conoces alguna situación parecida a la que estamos estudiando en la actualidad?

¿Cómo consideras esta expulsión desde tu punto de vista personal?

La evaluación valorará tanto los contenidos, su originalidad en la forma de exponerlos, como los aspectos técnicos (adecuación del lenguaje, fotografías, notas, webgrafía, etc.)

 

Además del buscador te recomendamos  buscar información dentro de este blog.

El muro de Berlín 1958-1963

Este documental nos muestra las actuaciones políticas de la URSS y EE.UU. respecto a Berlín Oeste.

 

 


www.Tu.tv

Magníficos documentales sobre la guerra de Vietnam

Capítulo I

 

 


www.Tu.tv
Capítulo  II

 


www.Tu.tv

Capítulo III

 

 


www.Tu.tv

Desembarco de Normadía. Día D.

Espero que disfrutéis de este interesante documental de canal Historia.

 

 


www.Tu.tv